ALEJANDRO ANANÍAS, Concepción, Chile

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1.- Perros.
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Los verdaderos hombres
cuidan a sus mujeres,
los más o menos cuidan a sus madres
y los poco hombres son enteramente felices;
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los primeros, con el hocico y la cola,
los segundos, siempre adictos a la leche
y los últimos, a punta de fornicio.
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2.- Parásitos.
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Me doy el trabajo
de abrir nuevas rutas
para que pase el pensamiento
y estos huevones llegan
y se suben al carro,
con cara de pensativos
y las manos llenas de piedras
escondidas en los bolsillos
llenos de billetes.
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3.- Pecado.
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Abundante ella, generosa,
siguiendo el ritual
sin detener el flujo primitivo,
lujuria por accidente
toda húmeda ella
vejada tiernamente
en los puntos cardinales,
besada y penetrada,
blusa cómplice, escondiendo
pezones cansados;
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rosa coqueta, abierta
al tallo resbaloso;
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ni diosa blanca
ni esclava negra,
sólo una mujer esperando
la promesa de Dios.
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4.- Polos opuestos.
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Freud no habría ido a Woodstock,
y de haberlo hecho
hubiera pifiado a Hendrix
a la Janis y a Santana;
habría piteado un poco de Peyote
tragado algo de Hachis,
marchándose indignado al comprobar
que la Neurosis tenía remedio,
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en pelota, y con música progresiva de fondo.
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5.- Libre elección.
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Prefiero ser un neurótico
prefiero ser un psicópata
prefiero ser un anarco
prefiero ser un parásito
prefiero ser un bolsero
prefiero ser un soñador
prefiero ser un ermitaño,
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pero un ejemplo para esta sociedad, jamás!!!!!!
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6.- Complejo.
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Entre mi madre y mi mujer
me tienen super acomplejado;
estoy esperando que me dé
un ataque de coraje
para así encontrar
un nuevo complejo al cual
adherirme.